martes, 1 de octubre de 2024

Nunca es tarde si la dicha es buena o cómo revivir este blog tras 11 años de silencio

Digamos que escribir siempre me ha ayudado a "metabolizar" mejor las cosas. Poner tus pensamientos en negro sobre blanco es como echarlos fuera de ti para después volver a hacerlos tuyos al leer lo escrito. Es mi manera personal de reflexionar. Llevo mucho tiempo sin hacerlo y no es que no lo haya necesitado. Primero, algo muy triste me dejó sin palabras. Más tarde mi vida dió un giro de trescientos sesenta grados y acabé viviendo en la otra punta del mundo donde he sido razonablemente feliz. Pero la vida no es perfecta, por supuesto: La añoranza de familia y amigos, el estrés al que esta sociedad te aboca, los años... No me quejo, ¡eh!... Como decían los de "Al Filo": La aventura es la aventura. Hace dos meses, sin embargo, algo muy doloroso ocurrió que me ha hecho volver aquí. No voy a entrar en detalles ni poner fotos escabrosas, ese no es mi estilo. Baste decir que creí volverme loco de dolor y que me considero muy afortunado por estar vivo. Hace justo dos meses volví a nacer. Y hoy vuelve a la vida este blog. Continuará...

jueves, 8 de agosto de 2013

Expebición: Una microaventura. Y aprendiendo...

Hace ya unas semanas (en realidad hace meses ya, a finales de mayo) me propuse una escapada de dos noches con la excusa de hacerles una visita express a Musso y Susana en Pinofranqueado. No disponía de más tiempo y serviría para ir determinando la configuración definitiva del equipo: Dónde llevar qué y cómo, comportamiento según reparto de pesos, etc, etc...



La mala fortuna quiso que cuando llegó la primera noche y me puse a montar el campamento, descubrí que el camelbak se había roto, que tenía la base de la mochila empapada (había pensado que sería sudor al notar la humedad) y que no me quedaba apenas agua para preparar la cena y beber.


 Ya había valorado antes, acarrear alguna botella complementaria para no depender exclusivamente de la mochila de hidratación, y este imprevisto me quitó las pocas dudas que me quedaban. Lamentablemente no había manera de solucionarlo en ruta, así que como el tiempo era limitado "volví grupas" y retorné al hogar, acortando a una sola pernocta la excursión. De todas formas el recorrido estaba anegado de agua en muchos de sus tramos (fué a finales de mayo) y el número de regatos/ríos a cruzar innumerables, lo que me hubiera impedido recorrer lo planeado en el tiempo previsto, o hacerlo al menos disfrutando y sin prisas.


Por la noche la temperatura descendió de manera considerable, lo que dejó una capa de escarcha en tienda, bici y todo lo que quedó a la intemperie. El ligero saco de plumas de Ferrino, no obstante, cumplió a la perfección y dentro del chalecito Tarptent no pasé ni pizca de frío. Además el día amaneció precioso, soleado y con un cielo azul (lástima de avería).


De los errores también se aprenden, así que parada para tomar un cafecito en Navasfrías y vuelta a casa por carretera.


Una microaventura, como se dice ahora, que me llevó a la convicción de que no hacen falta grandes viajes de muchos kilómetros por países desconocidos para sentirse transportado a otra dimensión.


Continuará...

domingo, 21 de julio de 2013

La Biciteca - El antro del "bicio"

Desde hace un tiempo habréis observado que en la parte superior derecha hay una foto muy chula de una bici con la leyenda "Mi otro yo". Los que por curiosidad hayáis pinchado en él alguna vez, os habréis topado con un blog dedicado a todo aquello que tenga que ver con la bici: Libros, pelis, música, fotografía, historia...

Pues bien, lo que comenzó como una manera de guardar todo aquello que tuviese que ver con la bici en un blog para ponerlo a disposición de cualquiera, ha culminado, gracias a la colaboración con la librería Hydria de Salamanca, en una bicilibrería online donde pondremos a vuestra disposición todo lo que encontremos publicado en castellano relacionado con el “bicio”. 


El antro del "bicio" como lo bautizó el otro día Atalanta


Hace unos años nos quejábamos de lo difícil que era encontrar libros, del poco conocimiento (y a veces poca predisposición e interés) en la mayoría de las librerías, de lo poco que se editaba sobre el tema en castellano (en otros países la literatura ciclista goza de muy buena salud). Soñábamos con darle solución a estas carencias… afortunadamente, no éramos los únicos, pues recientemente han surgido dos proyectos similares como son Libros de Ruta y la editorial Cultura Ciclista, esta última, de la mano de Bernat López, gran “culpable” del aumento de textos de calidad aparecidos este último año.
     Poco a poco iremos incrementando el número de títulos disponibles e intentaremos daros la mejor solución posible en los casos de libros descatalogados.
     Espero que os guste y que nos hagáis llegar todas aquellas sugerencias sobre lo que no.
     Y como promoción inaugural, los gastos de envío son gratuitos; así que aprovechad para darle alegría al “bicio”.

martes, 16 de julio de 2013

La tercera virgen - Fred Vargas

"Se había declarado en huelga como un obrero exhausto, iniciando una jubilación precoz. Alejarse de las crestas peligrosas, aguar el vino de los sentimientos, diluir, dosificar, quebrar la compulsión de los deseos. Y no le iba nada mal, a su parecer, lejos de los líos y del caos, cerca de cierta serenidad ideal. Relaciones inofensivas y pasajeras, natación cadenciosa hacia su objetivo, labor, lectura y versificación, estado casi perfecto".

Fred Vargas - "La tercera virgen"

Humor, mucho humor... aunque negro, muy negro.

jueves, 20 de junio de 2013

La Majá de Robledo - Las Hurdes

     Me da mucha pena tener abandonado a este viejo amigo, así que a ver si poco a poco voy retornando y dándole contenido de nuevo.


     Ayer estuve pateando por Las Hurdes. El hecho de que anunciasen un día medio nublado y sin altas temperaturas era tentador, pues por allí el termómetro en verano llega hasta cifras peligrosas.

Si tuviera la capa de Supermán ...
      Es además una zona con pocas sombras, y predomina el monte bajo, pues sus montes son pasto del fuego año tras año.


     Me habían hablado de un recorrido muy bonito, y no es que eso sea una excepción, porque lejos de la imagen que tiene mucha gente de la comarca como una zona pobre y atrasada, aquello es un auténtico vergel, con valles profundos llenos de cuidados huertos en terraza, frutales, pozas de agua cristalina y piscinas naturales casi en cada pueblo. 

    
     Además hoy en día es una zona bien comunicada con magníficas carreteras (aunque llenas de curvas, eso sí).

     
Además en estos días hay que sumar el aliciente de que están en plena recolección de las cerezas, por lo que en cualquier excursión nos toparemos con lugareños encaramados a los cerezos recolectá, cargando luego cajas abarrotadas en mulos y burros, para llevarlos por senderos estrechos y muy empinados hasta las pistas forestales, donde hacen el trasbordo a furgonetas y remolques. 

Soy un mocoso. ¡Qué pasa!!!


     Son gentes generosas en su mayoría, aunque también te topas con gente mayor que parece haber viajado en el tiempo (por su vestimenta y maneras) y se muestran huraños y desconfiados.. Yo siempre he sido muy respetuoso, pues entiendo que este fruto supone una de sus vías de subsistencia, y no sería viable que todo el que pase por estos caminos se dedicase a coger el fruto para llevárselo a casa. 


     Por eso cojo unas cuantas cerezas de aquí y allá, sin exagerar... basta pararse a charlar con cualquiera de los recolectores para que te ofrezcan un puñado de ellas. Me sorprendió, además cuando algunos me comentaban que la cosecha se la compran casi en su totalidad las conserveras para mermelada.



     Bueno, a lo que íba... la ruta tiene como protagonista o punto central del recorrido la llamada "Majá de Robledo" que es la Presa de abastecimiento de agua de varios municipios de la zona: Casares de las Hurdes, Carabusino, Casa Rubia, Las Heras, Huetre, Robledo y Asegur. Parece ser que el término "majá" proviene de que allí traían el ganado de cabras los pastores. Un lugar estupendo para darse un un buen baño.



     
     Es un recorrido circular, con un 40% aproximadamente de pista y el resto de sendero muy bien marcado y pisado, aunque no señalizado en su totalidad, o no de manera clara, al menos.  



     Me salieron unos 17 km aunque vislumbré un sendero que se podría utilizar para restar pista y alargar algo más el recorrido. Colgaré el track en wikiloc por si a alguien le interesa.

     Quiero darles las gracias a Pablo y Maite por hablarme de esta zona.

viernes, 5 de octubre de 2012

Crónica de un "viaje"...


Mosquis!!!
He encontrado una puerta a otra dimensiòn.
¿Y si la cruzo...?

Ya he cruzado!
Todo parece igual...
Un momento!!!
Aquí hay algo raro: Mirad que árboles más raros!!!!


Y los canarios y periquitos deben hacer culturismo, porque mirad el tamaño de la jaula.

Madre mía!!!
Los seres que habitan esta dimensiòn tienen un rostro parecido al nuestro, aunque más grande y bidimensional, pero es que sus cuerpos...sus cuerpos son edificios!!!! :-(

Y alguien me sigue!!!

Me vuelvo!!!!! 
Ufffff!!!!
Ya estoy de vuelta. No debí comer aquellas uvas sin lavarlas...

domingo, 2 de septiembre de 2012

¿Jaramugueando o haciendo el jumento?

Difícil respuesta, sin duda...
Tirado en el escaño que diría CiegoSabino, aunque en mi caso utilizo el sofá os voy a relatar en qué he andado entretenido estos últimos días.
El jueves, con una resaca del demonio después de beber demasiado zumo de uva la noche anterior en la improvisada cata de quesos que organizamos en La Pesquera (es que ya no estoy acostumbrado a jugar con los "mayores" porque últimamente no bebo otra cosa que "mahousinas") acompañé a mi abuela de vuelta al norte (sí, la famosa de las "Delicias de la abuela Raquel").
Y ya que estaba por allí, mientras daba un paseo para ver si se me pasaba el dolor de cabeza, se me ocurrió que me podía acercar a la Laguna Negra (uno de esos planes siempre postergados).
Paseando entre campos de girasoles en Rufrancos
A éste bicharraco también le deben gustar las pipas
Así que al día siguiente, madrugón y camino Soria, como decían los de Gabinete... Ya los cielos cubiertos del día anterior no auguraban nada bueno, pero parecía que según dejaba la provincia de Burgos la cosa mejoraba, el cielo aparecía despejado, aunque hacía bastante viento, y como pude comprobar más tarde, venía del norte porque era frío de narices.

El caso es que tras atravesar un montón de pueblos, y disfrutar con los paisajes y bosques sin fín de la zona, llegué a Vinuesa, de donde arranca la carretera que sube al aparcamiento del "Espacio Natural de Laguna Negra y Circos Glaciares de Urbión" que es como se llama el complejo que allí han montado. Y fué precisamente eso, el que hayan montado algo tan artificial, tan de parque de atracciones lo primero que me defraudó. Sólo hay una vía de acceso (en coche, porque luego me informé mejor sobre el tema y he averiguado que se puede llegar desde otros pueblos a pata), te cobran cuatro euros por aparcar allí (sin otra posibilidad), una pista asfaltada te lleva casi hasta la misma laguna), y debido a ello aquello está más concurrido que un Centro Comercial.

¡Que sí! Que entiendo que es el precio a pagar si queremos que las zonas naturales sobrevivan a las hordas de gentes irrespetuosas con el entorno, y demás argumentos, pero le quita mucha "autenticidad" al paraje.

El plan era ver la laguna, subir a los farallones que la rodean para disfrutar de las espectaculares vistas desde allí, tirar hacia el pico Urbión y visitar el nacimiento del río Duero que se encuentra a poco más de cuatrocientos metros de dicha cima. En total unos 16 km fáciles con algunos lugares muy bonitos, pero que no disfruté demasiado porque el viento gélido que soplaba no invitaba a detenerse demasiado.


Vista de la laguna desde la parte superior
Arco de piedra junto al pico Urbión, de cuya cima no tengo foto, porque había un autobús de excursionistas haciendo cola para lo mismo y pasé del tema...
Cruz y un belén que hay justo al lado del arco



Lo que se ve enfrente es el Pico Urbión y lo que se aprecia en primer plano es la cara de frío del que suscribe!!!!
Algunas cuestas más o menos pronunciadas, un par de lagunas más pequeñas y menos bonitas que la principal y llegué al pié de la cima, que estaba repleta de gente haciendo cola para la foto, así que subida rápida adelantando gente por los "arcenes", saludo de rigor a la cruz y "pabajo". A apenas cuatrocientos metros se encuentra el nacimiento del río Duero, que no es más que un charquito con un par de ranas, así que tras una breve parada allí para asegurarme de que no me había equivocado de lugar, retomo la ruta y cambio de sendero para llegar de nuevo a la Laguna grande (a la ída por la laguna del Urbión y a la vuelta por la laguna helada; o al revés...).

Venía con la intención de darme un chapuzón en un pantano con playa fluvial que hay a pocos kilómetros de Vinuesa (en la Laguna Negra está prohibido el baño), pero el frío me hace desistir, así que enfilo dirección Segovia para llegar a dormir a Gredos (luego cambiaría el plan por el cansancio y la paliza de coche).

Parada a repostar fuerzas en El Burgo de Osma, que tiene un parquecillo en el centro lleno de bancos y sombras, pero con un río maloliente y otra vez agarro el volante. Como comentaba antes, la bajada de temperaturas y el no haber llevado tienda de campaña (pensaba dormir en plan vivac) me hicieron cambiar los planes y pedir asilo en casa de los "Pequeñas Cosas" donde fuí calurosamente acogido. Debo señalar que Ane no sólo no lloró al verme, sino que además se mostró amistosa y me echó alguna sonrisilla; nada que ver con lo que me ocurre últimamente en cuanto me acerco a algún bebé. Cena rica, compañía estupenda, charleta sobre el Norseman y prontito a la cama, que el día había sido muy largo.

Madrugón de nuevo ayer para una de las jaramugadas del verano, ésta ideada por Atalanta: Ir corriendo desde Hoyos del Espino hasta el Refugio Elola en el Circo de Gredos y vuelta (38 km); para los más valientes, además con la opción de trepar hasta el Almanzor.

Los 6 valientes: De izquierda a derecha aparecen Ironmanu, Atalanta, David pequeñas cosas, Manu Sanctis, CiegoSabino y Arturo. No están todos los que son, aunque sí que son todos los que están.

Por una vez y sin que sirva de precedente, no hice el jumento y me conformé con la versión corta. Aunque poco a poco voy recuperando sensaciones a pata, quiero ir con cuidado. En seguida las liebres se me escaparon, y aunque los tuve a la vista casi siempre, no me atreví a intentar darles caza. Arturo y yo hicimos causa común, y nos hicimos compañía durante la mayor parte del día.

Vista desde la poza en que nos bañamos

Reagrupamiento en el refugio, y mientras los cuatro más osados enfilan hacia el Almanzor, los otros dos nos damos un chapuzón en una poza y disfrutamos del bocata y del sol. Tras una minisiesta, sin prisa comenzamos a descender y llegamos al pueblo a tiempo para ver el final de la etapa de la Vuelta y esperar a los demás sentados a la sombra con una jarra helada llena de zumo de cebada con limón al alcance de la mano.

Nos hicieron esperar casi tres horas más (son unos flojos), pero al final todos acabaron llegando y hubo tiempo para contar batallitas y para otra ronda de zumos (esta vez mahousinas). 

Hoy ha tocado colada, bañito tranquilo en La Pesquera, huevos fritos con patatas de la Mamma, lectura, televisión para ver cómo suben los pros Los Lagos de Covadonga y poco más... mañana vuelvo a la carga!!!!